Tabla de contenido
¿Sabías que, al igual que nosotros los humanos, los gatos también son susceptibles de sufrir cambios de humor e incluso casos de depresión? Por ello, es fundamental que el propietario conozca los principales síntomas de un gato triste, para poder ayudarle en estos momentos de dificultad.
En primer lugar, es importante ser consciente de que tener una mascota en casa conlleva responsabilidades innegociables. Al adoptar un gatito, el ser humano debe estar dispuesto a ir más allá de la simple tarea de alimentarlo.
Cuestiones como la dedicación de un tiempo diario para compartir momentos de complicidad y diversión son indispensables en la formación de un entorno saludable para el felino, así como la garantía de construir un hábitat en el que el animal se sienta literalmente como en casa.
Ignorar cualquiera de estos dos factores, por ejemplo, es dar pie a que tu amiguito se convierta en un gato triste.
Esté atento a los principales signos de un gato triste
Al igual que ocurre con los perros, los principales síntomas de un gato triste se manifiestan a partir de cambios en sus pautas de comportamiento.
Ver también: Begoniaasadeanjo: características, cómo plantar y mucho másEn este contexto, uno de los principales indicadores es la alteración del tono y la frecuencia de sus maullidos. Ya sea por un maullido más raro y grave o por su mayor incidencia y aumento de volumen, los cambios significativos en este elemento pueden indicar escenarios de tristeza o depresión.
Otro síntoma relevante a la hora de identificar a un gato triste es el cambio en su relación con la limpieza. En general, los gatos son considerados animales higiénicos que se adaptan fácilmente al uso del arenero para hacer sus necesidades.
Cuando esta característica empieza a dar paso a un comportamiento más descuidado e incluso vengativo para orinar y defecar, pasándolo a todos los rincones de la casa, esto puede ser un signo relevante de tristeza y mal humor.
Un gato triste también puede: evitar los juegos que antes le gustaban; optar por permanecer aislado en un rincón de la casa más a menudo; aumentar sus niveles de agresividad; y lamerse las patas y otras zonas del cuerpo casi compulsivamente.
Cómo ayudar a un amigo deprimido
La depresión en los animales de compañía debe tratarse con la misma seriedad que se ha llegado a ver en los casos humanos, por lo que es fundamental que el propietario acuda al veterinario en cuanto note algunos de los síntomas mencionados en el tema anterior.
Tras examinar al felino, el especialista podrá indicar las mejores opciones de tratamiento para este gato triste o depresivo.
Entre estos posibles tratamientos se incluyen cuestiones cotidianas, como un comportamiento más cercano y amistoso por parte del tutor, así como paseos más frecuentes. Adoptar otro gato para que haga compañía al gatito triste y le levante el ánimo también puede ser una opción viable.
En casos más graves, sin embargo, el veterinario puede recurrir a medicamentos homeopáticos y alopáticos para el alivio químico de las malas sensaciones que estén afectando a la mascota en ese momento.
Ver también: Remedio para la fiebre del perro: ¿cómo utilizarlo?¿Quieres saber más sobre la salud de los gatos? Consulta las entradas del blog de Cobasi:
- Displasia en perros y gatos: ¿cómo tratar la enfermedad?
- Creatinina elevada en perros y gatos: ¿qué es?
- Gotas oftálmicas para perros y gatos: ¿cuándo utilizarlas?
- ¿Puedo dar atún en lata a los gatos?
